La Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA) ha acumulado una deuda de aproximadamente 5.000 millones de pesos con la Empresa Neuquina de Servicios de Ingeniería (ENSI) por la operación de la Planta Industrial de Agua Pesada (PIAP) en Arroyito. Esta situación ha generado un riesgo operativo que afecta el mantenimiento y posible producción de agua pesada, a pesar de que existen compradores interesados. El Gobierno provincial ha estado reclamando a la CNEA por estos fondos, que son cruciales para continuar con las operaciones y proyectos de la planta. La falta de financiamiento podría perjudicar inversiones de empresas extranjeras, como Candu Energy Inc., que están considerando colaborar en el desarrollo de la planta.