El Estado de Neuquén fortalece su lucha contra el narcotráfico al incorporar bienes confiscados, valorados en 160 millones de pesos, para equipar a la Policía. Esta iniciativa forma parte de la segunda fase del Plan Integral de Seguridad que busca no solo investigar y clausurar puntos de venta de drogas, sino también utilizar estos recursos en la lucha contra el delito. En una ceremonia, el gobernador Rolando Figueroa y autoridades entregaron vehículos y motos incautados a las fuerzas de seguridad. Esto se enmarca en un enfoque más amplio para combatir el microtráfico, con la implementación de nuevas estrategias y cooperación entre distintos niveles del gobierno.